En A Través del Tiempo, del escritor Briar Weiss, se explica que: “la mayoría tiene un concepto equivocado de la hipnosis a causa de la manera en que la han presentado en la televisión, las películas y los espectáculos teatrales. Estar hipnotizado no es estar dormido, la conciencia sabe siempre lo que uno experimenta mientras está hipnotizado. La hipnosis no es un suero de la verdad. Durante la hipnosis tu mente está siempre despierta y observando. Es por eso, que al estar profundamente hipnotizado y envuelto activamente en una secuencia de recuerdos de infancia o de una vida anterior, podemos responder a las preguntas del terapeuta, hablar en el idioma que utilizábamos habitualmente, conocer los sitios geográficos que vemos y hasta conocer el año que suele aparecer ante la vista interior o presentarse en la mente. Su mente actual está despierta, observando y haciendo comentarios. Siempre puede comparar detalles y hechos con su vida actual, la persona es el observador de su película, su crítico y habitualmente también la estrella principal. En Conciencia de la Sanación, utilizamos la hipnosis como un modelo terapéutico integral, cuyo objetivo es la utilización de la meditación profunda, no para inducir un cambio de conducta en el paciente, sino como una herramienta de investigación para poder hallar el trauma original que está en el origen de los síntomas. En Conciencia de la Sanación, entendemos que tras los síntomas o conductas que se encuentran en situaciones traumáticas producen un bloqueo emocional aunque le paciente ignore conscientemente qué sucede, la información existe dentro de su inconsciente y puede ser recuperada siguiendo algunas pautas precisas para reparar, equilibrar y sanar los problemas que le aquejan.
¿Qué es la hipnosis?
La hipnosis es una terapia que consiste en una comunicación con el mundo interior o mente subconsciente, desconectándote del mundo exterior (olfato, audición, gusto, tacto y visión). El procedimiento se basa en lograr que la persona recuerde los acontecimientos de su vida que dieron origen al trauma o síntoma que lo aqueja. En Conciencia de la Sanación, utilizamos la hipnosis para hacer más fácil el acceso a los registros de la mente subconsciente y una vez logrado eso, se le motiva al paciente para que perdone, acepte, deje ir o elabore el duelo correspondiente. Así se liberan las cargas emocionales y se da el inicio de la reparación, recuperación y sanación. La hipnosis clínica es un método seguro que le permite al paciente desarrollar conductas que benefician su salud y lo ayudan a controlar el dolor, los trastornos de ansiedad, angustia, ataques de pánico y traumas. Con la hipnosis se obtienen resultados inmediatos. Esta terapia también puede funcionar como complemento a tratamientos convencionales, sobre todo, en caso de patologías orgánicas. Es peligrosos tapar el dolor cuando no se sabe de dónde proviene, por lo que el diagnóstico médico debe ser claro antes de empezar una terapia de hipnosis. ¿Por qué más personas eligen la terapia con hipnosis? Los pacientes ya no desean realizar tratamientos largos y necesita resolver problemas con mayor rapidez, y es aquí cuando la hipnosis ayuda, porque acelera el proceso de Insight del paciente en cuanto facilita el acceso a sectores de la mente que resultan inaccesibles en estado de vigilia. La hipnosis es una herramienta que permite focalizar la terapia en el problema que se quiere resolver.
¿Se pueden reconocer vidas pasadas a través de la hipnosis?
Las regresiones a las vidas pasadas son un caso especial de las regresiones en general. Aunque el paciente lo ignore conscientemente, esa información está almacenada en su inconsciente y puede ser recuperada a través de regresiones a la infancia, al útero o a vidas pasadas para afrontar de nuevo aquellos episodios y gestionarlos de manera distinta, con capacidades y recursos diferentes. Se trata de ofrecer al inconsciente una versión distinta sobre algo que ocurrió una vez, algo que resultó traumático y no quedó resuelto o no fue adecuadamente gestionado.
¿Por qué no recordamos nuestras vidas pasadas?
No recordamos las vidas pasadas para evitar la lucha con los recuerdos, porque si recordáramos el mal que hemos hecho o el sufrimiento que hemos pasado, las personas que nos han hecho daño o a quienes hemos dañado, no podríamos vivir entre ellos hoy. En ocasiones, esas personas del pasado son parte de nuestra familia y amigos en el presente que se están reuniendo con nosotros para la reconciliación.