En A Través del Tiempo, del escritor Briar Weiss, se explica que: “la mayoría tiene un concepto equivocado de la hipnosis a causa de la manera en que la han presentado en la televisión, las películas y los espectáculos teatrales. Estar hipnotizado no es estar dormido, la conciencia sabe siempre lo que uno experimenta mientras está hipnotizado. La hipnosis no es un suero de la verdad. Durante la hipnosis tu mente está siempre despierta y observando. Es por eso, que al estar profundamente hipnotizado y envuelto activamente en una secuencia de recuerdos de infancia o de una vida anterior, podemos responder a las preguntas del terapeuta, hablar en el idioma que utilizábamos habitualmente, conocer los sitios geográficos que vemos y hasta conocer el año que suele aparecer ante la vista interior o presentarse en la mente. Su mente actual está despierta, observando y haciendo comentarios. Siempre puede comparar detalles y hechos con su vida actual, la persona es el observador de su película, su crítico y habitualmente también la estrella principal. En Conciencia de la Sanación, utilizamos la hipnosis como un modelo terapéutico integral, cuyo objetivo es la utilización de la meditación profunda, no para inducir un cambio de conducta en el paciente, sino como una herramienta de investigación para poder hallar el trauma original que está en el origen de los síntomas. En Conciencia de la Sanación, entendemos que tras los síntomas o conductas que se encuentran en situaciones traumáticas producen un bloqueo emocional aunque le paciente ignore conscientemente qué sucede, la información existe dentro de su inconsciente y puede ser recuperada siguiendo algunas pautas precisas para reparar, equilibrar y sanar los problemas que le aquejan.